viernes, 24 de abril de 2009

Un tango báquico


Compadre, contenga el llanto;
ella nunca volverá.
Esa percanta no era para tanto,
si era taimada, ladina, y fulera de verdá.
Véngase conmigo al cotorro,
tengo amigas de licensiosa lealtad.
Habrá lucecitas de colores, música,
caña Legui y amistad.
Véngase usted conmigo,
que a nadie he de contar,
que le he visto llorando por una paica
que no valía un níquel impar.

2 comentarios:

  1. estas embarazada? si es asi..QUIERO QUE SE ME RECONOZCA LA PRIMICIA EN EL POST DE LAS NAUSEAS!

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  2. ¡Este texto me ha encantado! ¡Es campechano, lleno de saber popular y picaresco, y con la dulzura del consuelo! Me ha recordado otras cosas, pero ya las comentaré otro día.
    Felicidades.

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